“Pequeño mundo ilustrado” de María Negroni

Editorial: Wunderkammer

Año: 2019

Páginas: 203

Hace casi quince años leí Vidas imaginadas del escritor francés Marcel Schwob y fue un flechazo instantáneo. Esa lectura me aficionó de forma definitiva a los libros de biografías ficticias, los catálogos y las obras breves y variopintas que cuentan datos e historias desconocidas. Me gusta cómo estos libros sin pretensiones pero de honda sabiduría sirven para completar los datos ya conocidos de grandes acontecimientos y personajes. Su vocación de notas al pie de página que apelan a lo ya sabido para acabar revelando la verdadera naturaleza de los acontecimientos o de las escritoras, pintores u otros personajes  que admiramos. En esa categoría se incluye con notables méritos la obra Pequeño mundo ilustrado de la argentina María Negroni (Rosario, 1951) y que ha sido publicada en España por Wunderkammer.

Pequeño mundo ilustrado se compone de una colección de textos breves en la que se nos cuentan pequeñas historias sobre asuntos variados que incluyen la literatura, el cine o el arte. Los relatos comienzan sin relación, ordenados por orden alfabético. Esta es la única y aparente conexión entre los distintos relatos. Sin embargo, conforme avanzan las páginas, hay varios temas que van en el trasfondo. La simulación, las muñecas y los autómatas son temas que van surgiendo de forma reiterada en la obra. Distintos personajes del mundo de la cultura van paseando por estas páginas y se nos van narrando aspectos poco conocidos de su biografía, de sus obras o de sus personajes. Cada nuevo relato es una nueva pieza en este pequeño tapiz de datos y acontecimientos asombrosos.

El estilo de María Negroni es muy evocador, resultando elegante y distendido. Datos y referencias se van intercalando con naturalidad en unas piezas breves que brillan justamente por ese motivo, por ser cortas. La erudición que despliega la autora resulta generosa, en absoluto abrumadora e invita al lector a seguir indagando sobre lo que se cuenta. La curiosidad y el deseo por seguir conociendo son el tema de fondo de un libro donde las referencias cinematográficas brillan especialmente. A pesar de su brevedad, la obra invita a una lectura pausada, disfrutando de la cuidada escritura de Negroni y del caudal de información que inserta en una pequeña pieza de texto.

Pequeño mundo ilustrado es una ventana al conocimiento breve y opaco que con frecuencia se pierde en los grandes relatos. María Negroni deja al lector un inolvidable relicario de acontecimientos y vivencias injustamente olvidadas.